Para lograr la máxima autonomía posible, el C Evolution convierte en eléctrica la energía cinética de las desaceleraciones y las frenadas, y carga la batería. Asimismo, dispone de una útil y práctica marcha atrás auxiliar, que se activa desde un pulsador cercano al manillar izquierdo y se avisa en el display TFT.

El C Evolution, que se conduce como un maxiscooter convencional, está dotado de tecnologías de última generación, como la que permite recuperar energía en las fases de desaceleración y frenado, independientemente del modo de conducción seleccionado. En el momento que se suelta el acelerador, el propulsor eléctrico actúa de generador para cargar la batería. El grado de creación de electricidad depende del modo de conducción activado. También al frenar, se carga la batería, con lo cual toda la energía generada en el C Evolution se aprovecha al máximo, no como en un maxiscooter con propulsor de combustión.

La marcha atrás del C Evolution supone un notable aumento del confort, sobre todo a la hora de realizar aparcamientos. Al activarla, se siente un ligero y característico tirón. La maniobra puede realizarse de forma totalmente segura, a la mínima velocidad posible, lo que facilita maniobrar en lugares estrechos y poco accesibles.

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