Magnífico para movernos por la ciudad, para salir airosos ante cualquier situación de emergencia y para disfrutar con él los fines de semana, el propulsor de 647 cc y 60 CV, de dos cilindros en línea y sumamente compacto, es el más potente y eficiente de su categoría. Te sorprenderá su magnífico rendimiento.

El corazón de los BMW C 600 Sport y C 650 GT es una extraordinaria mecánica bicilíndrica de 60 CV a 7.500 rpm y 66 Nm a 6.000 vueltas, cuyo régimen máximo es 8.500 rpm. Tal es su empuje que la diversión llega en cuanto se enrosca el puño derecho, asegurando una magnífica movilidad urbana y también fuera de la ciudad. Esta joya de la ingeniería es un bloque completamente nuevo en el que se han adoptado las últimas soluciones tecnológicas, de ahí que se haya conseguido un conjunto sumamente compacto y con un sonido muy característico y vigoroso. Asimismo, su funcionamiento es verdaderamente sedoso y sin vibraciones, gracias a la combinación de desfase de los muñones y la incorporación de árboles de compensación.

Dotado de cuatro válvulas por cilindros y de dos árboles de levas en cabeza accionados por cadena dentada, viene con un sistema de inyección electrónica que consigue que el motor se ponga en funcionamiento con facilidad cuando está frío.

La colocación en posición baja del motor es sumamente beneficioso pues se logra un centro de gravedad también bajo y permite un plano adecuado de los apoyapiés del conductor.

Si se producen retenciones de tráfico que obligan a detener el maxiscooter con frecuencia o si el motor funciona durante algún tiempo al ralentí, se activa automáticamente un ventilador, manteniéndose siempre la temperatura óptima.

El propulsor se alimenta de gasolina súper sin plomo (95 ROZ) desde un depósito con una capacidad de 16 litros (cuatro de reserva) y se asocia a una cómoda y suave transmisión automática por variador continuo (CVT) que convierte en sencillos y placenteros cualquier desplazamiento.

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